Desapego

Existen varios factores que condicionan y obstaculizan nuestro progreso espiritual, que nos impiden expandirnos y sintonizarnos con nuestra Divinidad...

Tenemos, como ya sabemos, el Ego Mental o percepción errónea de la realidad y por otro lado la tendencia de éste a identificarse con las personas, objetos, circunstancias, espacio-tiempo...

tendremos que estar cada día más Presentes, utilizando el Discernimiento, la evaluación continua, y tendremos además, que ser muy compasivos con nuestros egos...ya que solo una parte de la verdadera comprensión que necesitamos, podrá ser procesada por nuestras mentes.

Tenemos que comprender e integrar que la finalidad de nuestra evolución no es ni más ni menos que La Gran Oportunidad, de sintonizarnos con el Plan Divino

Como expresiones divinas, se nos ha dispensado ahora esta Gran Oportunidad de sintonizarnos con el Mundo del Servicio, mediante nuestro Amor Incondicional, nuestra colaboración fraternal, soltado cualquier tipo de expectativa personal, de cualquier clase...nuestra Esencia Divina, lleva intrínsecos estos códigos de Servicio a la Unidad, y su única "posesión" es ser instrumento de Luz y Amor, de Ayuda, Guía e Inspiración para nuestros hermanos que aún no lo concienciaron...

El verdadero crecimiento espiritual, está absolutamente alejado del engrandecimiento personal, el reconocimiento...

¡SOMOS TODOS NOSOTROS LA GRAN VASIJA DONDE LO ETERNO
DEPOSITA SU NÉCTAR SAGRADO!

Como dicen los mayas, estamos en El Gran Salón de los Espejos, y somos UN ÚNICO CORAZÓN… por tanto seamos más que nunca compasivos con nosotros mismos y con nuestros hermanos (observa, transmuta desde el Corazón, bendice y suelta)…
Honremos todos los reflejos del Gran Espejo de la Humanidad y reconozcamos que el “enemigo externo” no es sino un reflejo de lo que hasta ahora no hemos podido o querido reconocer dentro de nosotros.

Toda la complejidad surge de esta lucha...la persona que se vacía de su importancia personal, se vuelve inocente como un niño, renuncia a luchar porque ya no le interesa "ser más", superior o probar que es "alguien especial", ha descubierto que no lo necesita, es ilusorio y se vuelve como una Rosa...


La desaparición del Ego es precisamente la Inocencia, la Inocencia que exhala el aroma de una Rosa llamada DESAPEGO...