Conciencia del Ser

La verdadera Conciencia de Ser no necesita seguridad en sí misma. No necesita asociarse con ciertos logros – dinero en el banco, buena apariencia, favores de otras personas, poder, títulos, posiciones – todos ellos son falsa seguridad en sí mismo.



Hacia lo que ustedes están avanzando ahora mismo es hacia la absoluta conciencia de su ser. Ella no necesita glorificarse a sí misma. Sencillamente es. No necesita adorar sus logros, no necesita de ellos para probarse a sí misma. La verdadera conciencia de su “ser-idad” no necesita estar al tanto o hacer historiales de lo que ustedes han hecho, dónde han estado, los empleos, los títulos o cualquier otra cosa. Está satisfecha en sí misma. La Conciencia de Ser es la seguridad en sí mismo de la Nueva Energía. No necesita nada más. No necesita alimentar, no necesita construir, no necesita seguir encontrando nuevas formas para identificarse a sí misma. Ella es lo que ella es.



Y por extraño que parezca, en ese estado de existencia al que todos y cada uno de ustedes está entrando, ahora aquello que ustedes llamarían sus logros o sus capacidades de improviso se vuelven muy naturales. No tienes que trabajar en manifestar algo. Sencillamente está. Es un resultado natural de la conciencia de tu ser. No tienes que acumular dinero. No tienes que encontrar ninguna nueva forma de glorificarte. Sencillamente llega a ser. Te glorificas a través del acto de estar consciente de tu “ser-idad”.



Sucede algo extraño. Te rascas la cabeza y dices; “Así que durante todo este tiempo luché, desafié, pasé por dificultades, padecí dolor y estrés – todo para conseguir las cosas que son absolutamente el resultado natural de la conciencia de tu ser”. Sí, absolutamente. Parece una contradicción, pero en realidad no lo es, porque en esta nueva Conciencia del Ser también introduces todas las Viejas Energías de la vieja seguridad en ti mismo. Y ellas entran ahora para crear lo que siempre trataste de crear antes, y lo hacen de manera natural. Lo hacen sin presión alguna. Lo hacen sin ningún tipo de desafío. Sencillamente sucede.



Bueno otra cosa simpática ocurre. Si en este punto hay algún remanente del viejo sí mismo humano, éste de hecho añora el desafío. Añora el juego. Añora sentir cómo es tener que aplicarse y luchar para manifestar. A veces hay una tendencia a querer regresar y decir: “Yo quiero hacerlo de la vieja manera porque era bastante divertido”. Ustedes no se están riendo (algunas risas, Adamus ríe entre dientes)



Pero también eso pasa rápidamente, y ustedes llegan a comprender el flujo natural. Llegan a entender que sencillamente todo viene a ustedes. Sencillamente es atraído.

Sencillamente está ahí. No hay razón para hacerlo difícil. El espíritu nunca exigió que fuera difícil – ustedes lo hicieron. El espíritu nunca quiso que fuera un desafío para ustedes, pero ustedes estaban fascinados con el desafío. Estaban fascinados con todo este juego. Pero ahora como lo veo en todos y cada uno de ustedes, ya terminaron con eso. Están listos para seguir adelante.
Adamus.